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Relevancia: Nacional

Santuario de Berobreo. Castro Facho

Clasificación: Inmueble

Descripción

Descripción General

Con vistas a las islas Cíes, la isla de Ons y la Costa da Vela, el castro del monte do Facho, en Cangas, es un lugar conocido por albergar un santuario con altares de la época romana en el que se han documentado más de cien aras. En este emplazamiento, situado a 184 metros sobre el nivel del mar, se han encontrado otros elementos como cerámicas de procedencia mediterránea en un suelo de ocupación de una cabaña circular. Se encuentra muy próximo al fondeadero de Barra, utilizado en la antigüedad como puerto por navegantes fenicios. Se han encontrado numerosos restos de cerámica y anclas anteriores a la época romana.

Descripción Especializada

El lugar acogió a lo largo de los siglos distintas expresiones de la vida en esta comarca, empezando en el siglo X a. C. con un poblado levantado en la ladera este, que permaneció hasta el siglo VI a. C., cuando surge el castro galaico, poblado fortificado que subsistirá hasta el siglo I a. C. De él aún se conservan parte de las murallas, el foso, las piedras que formaban sus viviendas y que hoy cubren las laderas del monte, los vertederos de basura en las márgenes del poblado y la topografía actual del monte, que deriva tanto de la construcción misma del poblado como de la configuración natural.

Posteriormente, un santuario levantado en la cumbre del monte va a recoger las viejas creencias de los que habían vivido en el castro, para dotarlas a lo largo de los siglos II al IV d.C., de un nuevo carácter, marcado por el proceso de asimilación de la cultura latina en la región del imperio romano, llamado Gallaecia. En este santuario se veneraba al Berobreo. Los altares votivos, aras en latín, son los hallazgos más significativos de las excavaciones del monte do Facho.
Los peregrinos subían a la cima del monte para levantar allí su ara o altar, una columna de piedra labrada, que dedicaban al dios Berobreo, para pedirle salud, como reza la inscripción en latín de estos monumentos: “Deus lari Berobreo aram posuit pro salute”.
Eran altares humildes, que en su mayor parte no superaban el metro de altura, aunque algunos superaban el metro con setenta centímetros. Hay 161 altares, acumulación que motivó la tendencia de los monumentos a ser estrechos y altos, formando lo que parecía un "bosque de aras". En ninguno otro yacimiento de la península se encontró tal número de aras. Al final de la existencia del santuario, el lugar fue abandonado, las aras fueron cayendo y amontonándose, a veces fragmentadas, para permanecer así hasta nuestros días.

El santuario se disponía en un área en pendiente que circunda la cumbre del monte. Existen restos de columnas que indican la existencia de un edificio, pero hasta ahora solo conocemos una disposición a cielo abierto de altares que, hincados en la tierra y en gran número, ocupaban buena parte de esa área.

Descripción Educativa

El Monte do Facho, situado en Cangas de Morrazo, es un lugar con unas vistas privilegiadas y mucha historia. La palabra facho hace referencia al fuego que prendían imitando a un faro para señalar, de este modo, la cercanía de la costa. Los investigadores e investigadoras han encontrado diferentes grabados en piedras que demuestran la antigüedad del primer asentamiento humano en este monte.
Debemos retroceder aproximadamente 2.500 años para hacernos una idea de cómo fue el primer poblado que ocupó sus laderas. Los habitantes de O Morrazo empezaron a construir sus viviendas en lo alto del monte. Era una ubicación perfecta pues, desde lo alto de O Facho, podían divisar las islas Cíes y las de Ons, así como controlar todos los barcos que se acercasen a la zona.
Subiendo hacia la cumbre, se encuentran los restos de un castro galaico-romano de formas irregulares. Llegaron a construir un poblado de unas 200 edificaciones, rodeado por una muralla interna y otra externa, con altares en su interior. Años después, se convirtió en un santuario donde los peregrinos oraban al Dios Berobreo. Hoy en día, se han descubierto 60 viviendas, 174 aras del santuario y restos de la época (moneras, cerámica, vidrios, metales).